Tras la merienda, tomamos un camino que sale antes de llegar a las casas hacia la derecha. Tras unas revueltas que nos permiten ver el tejado hundido de la posesión, el camino se va desdibujando a sendero. La idea es llegar a la Font de Raixeta. El sendero bastante sucio se sigue mas o menos por algunas fites estratégicas. Sube ganando altura por las Cingles de sa Milana. Pasamos una vaguada por un puente casi invadido por el càrritx y tras un último repecho y hacia la izquierda llegamos a la fuente. En los últimos tramos puede ser buena idea llegar a ella siguiendo la tubería. La fuente tiene agua aunque no mucha y casi toda se recupera por dicha tubería.
Tras la fuente continuamos en dirección norte hasta encontrar una pared que cruzamos y recorremos pegados a ella en ascenso hasta llegar a unas encinas, donde encontramos el sendero que rodea la Coa de sa Rata por el lado sur (también llamado Camí de ses Voltetes) y que viene de la finca de s'Alquería d'Avall. Desde aquí siguiendo la premisa de que todas las excursiones deberían tener un pico y un paso, nos diriguiremos hacia el Puig des Cocó (o Puig de s'Obi) para cumplir con el primer punto. Para ello vamos hacia el este, cruzando la pared de nuevo, hasta llegar al Coll del Cingle de sa Milana donde cruzamos otra paret de partió. El puig lo tenemos delante y llegamos a el en poco tiempo. Un montón de piedras coronan esta modesta cima aunque desde allí podemos ver buena parte de la Serra de Tramuntana: al sur los vecinos del Penyal des Llamp y Sa Falconera; al oeste Na Fàtima, sa Fita del Ram, Puig de Galatzó, Mola de Planicia, Mola de Son Ferrandell, Comuna de Valldemossa; hacia el norte la Moleta de Pastoritx, Coa de sa Rata, Penyal de sa Rata, Puig de sa Font; y hacia el este el Puig Major, Serra d'Alfàbia, Penyal d'Honor, Puig de son Nassi y Puig de sa Gubia (o Puig de S'Alqueria), estos dos últimos cercanos también a nosotros. También se ven hacia el sur el Puig de San Salvador, el Puig de Randa y todo el llano y bahía de Palma.
Tras este atracón de paisaje volvemos sobre nuestros pasos hasta el collado y hasta la otra pared, donde quedaron unos pocos reservando fuerzas para lo que vendría a continuación. Continuamos hacia el noroeste siguiendo el sendero hasta que poco antes de que empiece la bajada hacia Pastoritx, unas fitas nos indican un desvío a la derecha (este). Volvemos a remontar esta vez las laderas de la Coa de sa Rata hasta llegar a unos pinos donde giramos a la izquierda (norte) manteniendo mas o menos el nivel. Nos encontramos con una pared que atravesamos por un portillo y después una era. Desde allí tenemos una magnífica panorámica de las casas de Pastoritx. Seguimos en la misma dirección mas o menos a nivel hasta encontrar, tras una especie de pequeño collado, unas fites que nos indican para la izquierda (oeste). Por ahí hay que ir, bajando por una pendiente bastante empinada y teniendo cuidado al poner los pies para no encontrar gravilla o tierra que son los grandes enemigos en las bajadas. Tras unos 10 minutos de descenso tomando todas las precauciones necesarias llegamos a la altura de un coll de tors donde nos agrupamos. Lo peor de la excursión ha pasado, pero aún queda por hacer el paso que da nombre a la excursión.
Pasamos a la parte de atrás del coll de tords y nos vamos metiendo en una grieta de la montaña en descenso. Al final hay una pequeña canal con un destrepe (antes había una rústica escalera de madera, cuyos restos se ven tirados al lado, por la que se hacía mas fácil la bajada). No es nada difícil y poco a poco todos vamos descendiendo. Tras el destrepe, encontramos un cable a modo de pasamanos y después el tauló que da nombre al paso. Un tablón de madera encajado haciendo de pasillo para salvar un tramo de roca en pendiente. No tiene ninguna dificultad y solo queda salvar otro pequeño tramo de roca con la ayuda de un grueso hierro a modo de pasamanos. Una vez realizado todo el paso, un sendero nos dirige hacia el camino-sendero que desciende de la Coma de ses Sitges. Al llegar al camino remontamos un poco para alcanzar las ruinas del Racó des Colomer donde paramos a comer y descansar.
Tras recuperar fuerzas solo nos queda el descenso por camino hasta llegar a los campos de cultivo de Pastoritx. Rodeamos la posesión dejándola a la derecha y admirándonos de las construcciones que antaño hicieron para canalizar el agua de los torrentes. Poco antes de la Font de Pastoritx que dejamos a la izquierda, cruzamos un afluente del Torrent de Raixa y después siguiendo un sendero casi a la orilla de este torrente vamos poco a poco cerrando el círculo de la ruta. Una vez en Raixeta y tras una foto de grupo (típica en unas escaleras) recorremos en dirección contraria el camino que hicimos por la mañana llegando a Raixa a eso de las cuatro y media de la tarde.
Excursión fácil excepto el fuerte descenso hacia el curioso Pas des Tauló y con buenas vistas de la Serra desde el Puig des Cocó. Han sido unos 14 km con un día soleado en su mayor parte pero no por ello ha molestado la chaqueta en ciertos momentos.
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Fotos de la excursión
