Casi a las 10 empezamos a caminar por las calles de Valldemossa y pronto nos encontramos ante la reciente caseta de control que hay en la subida que accede al Pla des Pouet. Nuestro guía, Martí, pidió hace bastante tiempo el permiso correspondiente para poder pasar sin problemas. Por lo visto no dejan pasar mas de 50 personas al día, y el resto tiene que desviarse o subir por otros caminos. ¿Será el primer paso para un nuevo control de pago para acceder a la Serra?
En la caseta nos atienden bien y nos dan unas explicaciones e instrucciones. También nos dan unos folletos de la fundación y lo que hacen y se puede ver en la zona 'controlada'. Subimos poco a poco por el camino, ganando altura progresivamente. Algún despiste he tenido y no me he dado cuenta del paso por la Font de s'Abeurada (tras ver otras acciones por la zona, es posible que la hayan dejado un poco mas en condiciones, sin quitar la posibilidad de coger agua en caso de necesidad).
Un poco menos de una hora nos ha costado llegar a la entrada del Pla des Pouet, donde otro guarda nos recibe y le enseñamos las 'acreditaciones' que nos han dado en el control anterior. Por los alrededores se ven recientes repoblaciones de árboles y arbustos de la zona. También el propio pou que da nombre a la zona está mejorado y un poco mas decente. Parece que la zona ha ganado con los controles.
Desde el pou vamos en dirección noroeste hacia el Mirador de Can Costa (o de ses Puntes). La idea inicial era merendar en el Pla des Pouet, pero mejor alargamos un poco la caminata y lo hacemos en el mirador con mejores vistas. No hace mucho calor, todavía, y el viento es fresco y agradable y se agradece también llevar puesto el jersey. En el mirador vemos nuevas actuaciones, con arreglos en las almenas que caracterizan este mirador. Antaño muy degradadas, hoy disfrutan de una nueva primavera sobre los acantilados.
Tras la merienda y la foto de grupo retomamos el camino en dirección a la Talaia Vella. No hay pérdida posible y desde ese punto geodésico también disfrutamos de un bonito paisaje de la Serra y de la Bahía de Palma. Desde el mirador han pasado 15 minutos, y 10 minutos después llegamos a la caseta o Refugi de s'Arxiduc. Desde aquí bajamos al Coll de Son Gallard. A la derecha volveríamos otra vez al Pla des Pouet. Por la izquierda iríamos por el Estret de Son Gallard. Nosotros remontamos la ladera que tenemos enfrente para conectar con el Camí de s'Arxiduc sobre los Cingles de Son Rul.lan. Pero antes hacemos una parada en la Cova de s'Ermitá Guiem, pequeña cueva con varias estancias antiguamente ocupada por ermitaños. La estancia es un curioso batiburrillo de objetos religiosos de varias las creencias y culturas. Muchas biblias en las estanterías y otros libros de temática religiosa. Pero la verdad es que te sientes en esos momentos relajado y tranquilo, y como un poco ermitaño.
Tras la cueva remontamos al norte y enlazamos con el Camí de s'Arxiduc, un espectacular camino sobre los acantilados, mandado construir por el Archiduque Luis Salvador a finales del XIX. El camino es un balcón hacia el mar y hacia la costa y tampoco desmerece nada el paisaje del lado contrario. La Foradada destaca entre todas las demás. Poco a poco lo vamos recorriendo en dirección noreste, hasta que lo dejamos a la derecha, hacia el Caragolí. Nosotros seguimos el mismo sentido noreste ahora ya siguiendo el GR-221. Desde la cueva ha pasado media hora.
Tras un inicio de descenso suave, el camino empedrado se agarra a las paredes del acantilado para descender en cerrados zig-zags. Poco a poco nos va envolviendo el encinar y como ya es buena hora para parar a comer, en una balma que hace la pared paramos a reponer las fuerzas poco antes de las dos de la tarde.
Tres cuartos de hora mas tarde retomamos la marcha. No queda mucho para terminar la excursión. Pero en esta zona hay que ir un poco con ojo. Hay muchos senderos y caminos que parten del principal y conviene estar atentos, si bien lo único que puede ocasionar es perder un poco el tiempo. Así nos ocurre en un par de ocasiones, pero sin mayores consecuencias que idear una situación cómica y un ataque de risa de todos nosotros. Quien quiera mas explicaciones, que hubiera venido.
Dejamos atrás el encinar y nos adentramos en el olivar. Aquí ya se nota el calor y el sol empieza a molestar un poco. El GR pasa al lado de la salida de la mina de una fuente (Font de sa Rota, según www.fontsdetramuntana.com). Un pozo al final de la mina con agua fresca invita a refrescarse con ella. El camino continúa descendiendo entre bancales y olivares, destacando el paso al pie del Castell del Moro (pequeña fortificación de la época musulmana). Media hora mas de caminar y llegamos a las calles de las urbanizaciones que rodean Deià y al aparcamiento donde han dejado el coche esa mañana. Son las cuatro de la tarde cuando damos por terminada la excursión.
Realmente terminamos en un bar del pueblo en compañía de unos gorriones que picotean migas de pan sin la más mínima vergüenza. Han sido casi 14 km acompañados de un día espléndido que nos ha permitido disfrutar de unos paisajes que si bien son conocidos, no por ello dejan de tener su encanto.
Powered by Wikiloc
CMP Valldemossa-Deià |
De CMP Valldemossa-Deià |
No hay comentarios:
Publicar un comentario