domingo, 17 de noviembre de 2019

Puig de Galatzó

Hoy hemos sido poquitos. Solo 8. Pero con ganas de patear, aunque ya adelanto que no hemos cumplido con la previsión.
Unos minutos después de las nueve de la mañana, emprendemos la ruta en dirección a las casas de Galatzó. El guía en esta ocasión es Adrián. Seguimos el GR-221-C. Caminamos entre campos de cultivo mientras llegamos a las casas. Nos sorprende en las cercanías de las casas unas plantas robustas de grandes hojas que no sabemos qué puede ser. Mis conocimientos botánicos no recuerdan una especie de estas características que crezca de forma natural. Es posible que sea una planta foránea que se haya naturalizado. Tras dejar las casas con su característica fachada llena de piedrecillas a la izquierda entramos rápidamente en el Comellar de ses Sínies. Seguimos un camino ancho que va por el fondo del valle. Por la derecha tenemos el Puig des Caragol y la Moleta de Galatzó y a la izquierda el Puig Batiat, Sa Cadira des Bisbe, Es Moletó y la Mola de s'Esclop. Poco a poco sin darnos cuenta vamos ascendiendo por el comellar, y poco después de pasar un horno de cal muy bien restaurado y al calor del sol que nos está acompañando hacemos la parada para merendar.
Hacemos una parada corta, apenas 20 minutos, tras la cual retomamos la marcha. Pronto dejamos un área recreativa a la derecha y el Pou de ses Sínies a la izquierda y el camino, mejor dicho, sendero empieza a empinarse, un poco al principio y tras la Font des Polls algo mas. La subida se hace dura y hacemos varias paradas para tomar aire y esperar a los rezagados. Dejamos unos cuantos rotllos de sitja que indican que por aquí antes había encinar pero que ahora ha desaparecido prácticamente. Al rato llegamos a un cruce que en su día estaría bien señalizado pero ahora falta una indicación importante que es hacia donde nos tenemos que dirigir, y eso hace que nos despistemos y tomemos la dirección equivocada. Vamos hacia s'Esclop, dejando el Puig de Galatzó a la espalda. Así llegamos al collado de la Serra des Pinotells donde revisamos la ruta y decidimos regresar hasta el cruce y tomar la dirección correcta. Este sendero ya no es el GR pero está bien marcado. Pero no quita que poco antes del cruce del Pas des Cossis y siguiendo unas fitas equivocadas nos desviamos nuevamente esta vez hacia Sa Moleta Rassa, una pequeña cima que teníamos que haber rodeado por la izquierda peo que ahora estamos subiendo la ladera. Poco antes de la cima la dejamos a la derecha y vamos fora camí para encontrarnos con el sendero 'oficial'. Ya llevamos casi 4 horas de marcha y hay que pensar en la vuelta (en estas fechas oscurece pronto, y mas teniendo en cuenta que el sol nos ha dejado y hay algo de nube y aire). Así que decidimos andar un poco mas hasta que encontremos un sitio al abrigo del viento para parar a comer y descansar antes de volver hacia los coches. Paramos poco antes de llegar al cruce del Pas de Na Sabatera y el desvío hacia la cima. No es mucho lo que queda, pero ya lo haremos en otra ocasión. A fin de cuentas, el Puig de Galatzó no se va a mover de ahí y se puede ir en otro momento. Comemos con unas preciosas vistas de la costa de Estellencs, cuyo pueblo vemos a nuestros pies. Antes de regresar, Adrián y Biel se adelantan hacia el Pas de Na Sabatera al que llegan en poco tiempo. Allí un letrero indica que quedan unos 45 minutos hasta la cima.
Regresamos por el mismo camino, rodeando esta vez sí, la Moleta Rassa. La vuelta no tuvo ningún despiste. Y al llegar a las casas de Galatzó nos detenemos un momento para visitar la tafona y otras dependencias. Como se ha visto, no hemos cumplido con el objetivo de la excursión, pero ha sido una buena pateada de algo mas de 18 kilómetros. Así que nos vamos satisfechos y si se quiere, el año que viene se vuelve a intentar ya sea por el mismo o por otro camino.

Powered by Wikiloc

Fotos de la excursión

sábado, 19 de octubre de 2019

Coves de Llevant

Hoy tocaba una excursión mas de espeleología que de caminar. De vez en cuando hay que hacer algo diferente y Jesús nos ha preparado una pequeña ruta por los alrededores de Porto Cristo. El plato fuerte era la visita a unas cuevas, algunas conocidas y otras no tanto.
Empezaremos en el aparcamiento del Estany d'en Mas, en Cala Romantica. Llegaremos hasta casi Cala Falcó y regresaremos. Una excursión cortita, de poco mas de 6 kilómetros, ideal para el día que hemos encontrado y en el que puede haber algún chubasco que nos pille de camino. A las 9 estamos ya esperando la salida. Jesús me entrega un recuerdo del grupo y por el que le quedo muy agradecido. A las nueve y cuarto emprendemos la marcha (en total somos 19, grandes y pequeños), atravesando la playa para remontar la ladera opuesta por una rampa empinada rodeados de pinar. Casi será lo mas fatigoso que haremos, pues en poco tiempo remontas una treintena de metros o algo mas. El terreno se suaviza y la vegetación pasa a ser la típica de las marinas costeras: matas, acebuches, cojinetes espinosos y otras plantas habituadas a zonas cercanas al mar. El terreno es muy rocoso, nada fácil de andar sin mirar donde pones los pies.
Apenas media hora después nos hemos de desviar del recorrido para bajar a la orilla del mar. Ahí está la primera de las cuevas que visitaremos: la Cova de ses Pedreres. Destrepamos un poco de ancantilado donde mas fácil parece y recorremos la costa hacia el sur. Unos 5 minutos después encontramos un agujero de poco mas de medio metro de diámetro. Hay que gatear a través de el para entrar en la cueva. Una vez dentro sorprende las dimensiones de la cueva. Es una cueva pequeña sin muchas galerías y recovecos pero es alta y amplia. El fondo es de arena y se ven por aquí y por allá depósitos de Posidonia que indican que la cueva es inundada periódicamente a causa de los temporales. Es curioso también que hay formaciones de estalactitas y estalagmitas muy recientes y de rápido crecimiento, identificables por el color blanco casi inmaculado de ellas. Algunas de estas formaciones crecen incluso sobre depósitos de Posidonia. En las paredes se ven las típicas coladas formando como pisos y al final de la cueva se encuentras unas cuantas columnas mas o menos gruesas. Aquellos interesados pueden leer un artículo sobre esta cueva de la revista Endins en este enlace.
Retrocedemos por el mismo camino y ascendemos de nuevo por donde hemos bajado anteriormente. Andamos una media hora y nos volvemos a desviar de nuevo. Tenemos que bajar de nuevo a la costa. Esta vez la bajada es un poco mas complicada, pero no difícil. Una vez abajo tenemos al sur una pequeña explanada de tierra a modo de collado a escasos dos o tres minutos. La Cova des Moro está allí cerca. Pero antes de entrar a visitarla haremos la parada para la merienda. Una vez terminada, vamos hacia la cueva. Está detrás de unas matas en la pared del acantilado, allí mismo donde hemos merendado. La entrada está definida por unas rocas al estilo de los talaiots, con una gran piedra a modo de dintel. Jesús nos indica que dentro aún se ven restos (cuerdas principalmente) de las excavaciones que se han estado haciendo en la que se encontraron abundantes restos de Myotragus. También hay una serie de cuerdas para hacer recorridos hacia otras partes de la cueva y poder volver al camino principal sin problemas. Entramos por la puerta y a través de un pasillo de piedra entramos en la sala principal que es bastante grande. A nuestra derecha encontramos unos agujeros producto de las excavaciones y las cuerdas que indicaba Jesús, pero que parece que ya hace mucho que no se utilizan. La cueva no tiene galerías secundarias, pero tiene sus pequeñas maravillas que hace que nos detengamos y hagamos fotos cada poco. En esta cueva, al contrario que la anterior, no se ven formaciones recientes y se ven pocas estalactitas que tengan esa típica gota de agua en su extremo. También podéis leer un artículo de esta cueva en la revista Endins picando en el siguiente enlace.
Tras la visita, ascendemos de nuevo a la garriga superior. Jesús nos invita a hacerlo por una 'chimenea' cercana en vez de subir por donde bajamos. Está a unos 20 metros a la izquierda saliendo de la cueva. Es un poco escarpado y algunos prefieren subir por el lugar de bajada. Ya solo queda visitar la Cova des Pirata, una de las típicas de esta zona y que seguramente recibe un montón de visitantes cada año. Vamos hacia el noroeste hasta encontrar un camino ancho. A los 10 minutos giramos a la derecha por otro camino y cinco minutos después en una depresión en medio de unas matas e higueras encontramos la entrada a la cueva. Es ésta muy grande y con numerosos rincones dignos de fotografiar. Tiene la ventaja de que se ven 'pasillos' por donde han caminado todos los que la visitan y además se encuentran escalones trabajados en la propia piedra (en su día se la quiso dar un uso turístico). En la parte mas profunda, además, hay un 'pequeño' lago, lo que la hace mas interesante si cabe. Perderse en ella es difícil y no hay zonas especialmente peligrosas. Pero no quita que no haya que ir con cuidado, mirando donde se pisa no vaya a ser que haya algún agujero o alguna sima. Ya puestos a poner referencias, os pongo una de un artículo muy completo también de la revista Endins en este enlace. Veréis que la parte que está sumergida es casi tan grande como la que no lo está.
Hay incluso comunicación con la Cova des Pont, que está muy cerca y a la que nos acercamos después de visitar la Cova des Pirata. Pero solo vimos un poco de la entrada y del puente que le da nombre.
El regreso a Cala Romántica lo hicimos por el camino que pasa por la depuradora y las instalaciones de un hotel, dejándonos casi en el aparcamiento. Es pronto por lo que buscamos un rincón donde comer y tomar un café o un refresco después. Es entonces cuando caen unas pocas gotas pero que mas que fastidiar, ayudan a refrescar un poco el ambiente.
Como se ha dicho, una excursión cortita pero muy interesante por la visita a las cuevas. A aquel que las visite que tenga las máximas precauciones (patinazos, tropezones, llevar linternas y pilas de recambio e ir acompañado mejor que solo) y respeto a lo que la naturaleza a tardado tantos años en crear.

Powered by Wikiloc

Fotos de la excursión
Vídeo de la excursión (20 Mb). Gracias Jesús.


sábado, 21 de septiembre de 2019

S'Estaca

Añado esta entrada de la primera excursión de la temporada 2019-2020 para poner el enlace de las fotos que hizo Jaume. Por lo visto se lo pasaron en grande.

Fotos y Vídeo (29 Mb) de la excursión.

domingo, 16 de junio de 2019

Torrent de Pareis (2019)

Como siempre, la última excursión de la temporada es el Torrent de Pareis. Hoy nos hemos juntado 26 (algunos niños incluidos, que lo hacen por primera vez). Seis de nosotros han quedado para remontar, como otras veces han hecho. A la vez que hacemos el habitual movimiento de coches, el resto esperamos con impaciencia. El día está soleado y se espera calor.
Una vez ha llegado el coche con los conductores, tomamos desde Escorca el sendero desde la carretera y que rodea los campos de cultivo llegando a la Penya Foradada. Es el inicio del Camí des Burgar. Tras esa roca característica (fuera del sendero, a la derecha) empieza la bajada propiamente dicha hacia S'Entreforc (que lo tenemos y vemos delante de nosotros). El camino de bajada se hace sin complicaciones y parando un momento a probar el funcionamiento del 'eco'. Un rato largo mas tarde llegamos a S'Entreforc donde ya nos están esperando nuestros compañeros que han remontado. En S'Entreforc coincidimos con otro grupo que también está haciendo la excursión. Es un grupo numeroso que ha llegado en autocar a Escorca, pero aquí abajo solo hay una pequeña parte. El resto o están visitando Sa Fosca o han empezado la bajada. En una de las pareces de S'Entreforc, mas o menos a media pared, hay una pareja de escaladores.
Tras la merienda y el descanso empezamos propiamente la excursión. Ascendemos un poco para bajar a Sa Llosa y llegar a la primera dificultad: el Gorg des Cingles. Arriba a la derecha nos vigila la Cova del Soldat Pelut. Salvado el primer escollo vienen otros dos casi seguidos y después un tramo mas o menos cómodo, eso si, saltando de piedra en piedra, llegamos a la Cova del Romagueral, donde descansamos un poco a la sombra de las paredes.
Nos hemos fijado durante el camino en una serie de trampas con mariposas dentro. Recuerdo haber leído a principio de año algo de una plaga que ataca el boj. Y en efecto, es la oruga de la Cydalima perspectalis o polilla asiática del boj la que estamos viendo en las trampas. Aunque fuera de ellas hay centenares de ellas, algunas volando, o posadas o muertas en los charcos. Son las que vemos... las que no vemos deben de ser innumerables. Vemos también muchas matas de boj literalmente comidas por la oruga de esta mariposa. Esa misma polilla la vi a millares en una carretera de Francia en mis recorridos pirineísticos. Confiemos que puedan erradicar esta nueva plaga que invade nuestro medio natural.
Tras la cueva está el tramo mas estrecho y mas sombreado, conocido como Salt des Soldat Pelut. Nos quedan unos pocos pasos complicados entre ellos el de S'Estaló, objeto de discusión estos últimos meses tras la noticia de que unas piedras lo habían bloqueado un poco. Al final no parece que esté diferente de otros años. Hay una cuerda colocada, al igual que en otros sitios, y que ayuda un poco en la bajada. Tras este paso viene el Gorg de sa Creu y el del Grassos Estrenyeu-vos, y así llegamos a Es Degotis, esa especie de fuente a la que se llega con ganas de refrescarse. También ha cambiado la fisonomía. De la higuera que había encima no queda casi nada. Menos mal que gotea un poco y podemos tomar una pequeña ducha.
Queda la parte mas sencilla pero también soleada. Además nos cruzamos de tanto en tanto con turistas que ascienden por el torrente 'a ver donde llega'. Al final terminamos en la playa de piedras de la desembocadura ocupada por gran cantidad de turistas y nativos, tomando un baño o el sol. Nosotros aprovechamos también para nadar, aquellos que quieren, o descansar un rato antes de ir a comer a una pequeña terraza encima del centro médico.
Una nueva temporada ha terminado. Por suerte no hemos tenido ningún percance grave. La próxima temporada está a la vuelta de la esquina cargada de nuevas excursiones.
Feliz Verano.

Fotos y Vídeo (29 Mb) de la excursión. Gracias, Jaume.

domingo, 19 de mayo de 2019

Volta a Mallorca: Cala Marçal - Cala Serena (etapa 30)

La excursión de hoy es una nueva etapa de la Volta a Mallorca. Ya van quedando menos y para el año que viene se terminará el proyecto que comenzó Jaume hace tiempo. Hoy hemos quedado en la playa de Cala Marçal. Y a las nueve ya estamos los que somos (11), listos y dispuestos para empezar a andar. Pero antes, hay que mover coches, por lo que tardaremos un poco en salir mientras vamos y venimos. Dejaremos los coches en Cala Serena (final de excursión).
Falta un cuarto de hora para las diez cuando empezamos a caminar por el paseo (lado sur) que bordea la playa, solitaria en estos momentos. En seguida dejamos la zona de servicios y vamos bordeando la costa para al poco rato pasar entre unas casas y salir a 'mar abierto'. El mar está casi en calma y solo se ven algunas nubes a lo lejos. Ya nos damos cuenta del terreno que pisaremos durante casi toda la excursión. Terreno áspero muy erosionado por el aire, lluvia y mar. Si nos acercamos a la orilla del acantilado, el mar está a unos 15 ó 20 metros por debajo. Andamos hacia el sur entre las rocas sorteándolas mal o bien. Hoy van a sufrir las suelas y será una dura prueba para ellas. Frente a nosotros tenemos un islote (el Faralló d'en Fred) separado unas decenas de metros de la costa. Al poco tiempo pasamos por una cueva o agujero por la que podríamos llegar al mar (con el equipo adecuado, evidentemente) que vemos al fondo.
La roca que pisamos apenas tiene tierra pero en la poca que hay crecen plantas acostumbradas y adaptadas a este tipo de ambientes extremos: flors de tot l'any, sabinas, coixinet de monja, saladinas, ... y un poco mas separada de la costa, la garriga de mata y ullastre junto con lletreras. Llegamos a Cala Brafi, una pequeña cala con un poco de playa arenosa y una caseta medio derruida. Encontramos unas personas que se tuestan sin pudor al sol de la mañana. Nos alejamos un poco de la playa y hacemos la parada habitual para merendar bajo los pinos. Hemos andado de momento tres cuartos de hora. Al sol hace calor, pero a la sombra aunque parezca mentira hace algo de fresco.
Como la excursión es cortita nos tomamos la merienda con calma así que tardamos un poco mas que lo habitual en emprender la marcha. Seguimos hacia el sur bordeando la costa. Llegamos a una nueva cala, Cala Estreta, muy estrecha, como su nombre indica, y pedregosa, pero muy coqueta. Tras ella, al poco rato pasamos por un agujero en las rocas. Nos comenta Jaume que es un secret de contrabando, donde en tiempos del estraperlo se escondía la mercancía que llegaba por mar.
Poco después llegamos a Cala sa Nau, una nueva playa arenosa, con servicios (chiringuito, vigilante, ...). Ya hay bastante gente tomando el sol, aunque nadie está dentro del agua. Se ve que está fría todavía. Hemos tardado una hora aproximadamente desde la parada de la merienda. Dejamos la cala atrás y pasamos al lado de unas cuevas artificiales de uso funerario de la edad del bronce. Una nota mas de cultura en este ambiente costero. El siguiente punto destacable por el que pasamos es por Sa Foradada del Llevant, un agujero en una roca similar a la conocida Foradada (aunque salvando las distancias). Aprovechamos la ocasión para hacer la foto de grupo.
Seguimos adelante llegando a Cala Mitjana, donde una arboladura (que me perdonen si no se llama así) colocada en las rocas nos da la bienvenida. Por desgracia, poco antes de llegar, un mal paso ha hecho que una de nosotros caiga haciéndose unas magulladuras y rozaduras en piernas y manos. Por suerte no parece nada grave. En Cala Mitjana entramos en una zona mas selecta y privada, aunque en ningún momento hay señales que nos impidan seguir la excursión. Cuando llegamos, un gran velero sale de la cala. Nosotros recorremos la orilla viendo campos de césped y jardines bien cuidados y casas que a saber lo que valdrán. También pasamos por una pequeña cala de arena y por un embarcadero. Desde la cala anterior han pasado unos tres cuartos de hora.
Nos queda el último tramo que hacemos sin complicaciones. Llegamos a las primeras casas de Cala Serena y vamos bordeando la costa entre las casas y el acantilado, hasta que giramos por un pasillo entre chalets por el que llegamos a las calles de la urbanización y por ellas y tras bajar unas escaleras llegamos a la playa de Cala Serena, a la que llegamos a eso de las dos de la tarde. Hora de comer. El agua del mar está fría como suponíamos y como mucho nos mojamos los pies, aunque Jesús y Guillem sí que se meten en el agua del todo.
Ha sido una excursión cortita, suave, con buen tiempo y por paisajes muy vistosos. Apenas 8 ó 9 kilómetros. Como ha sido corta, una vez de vuelta a los coches nos acercamos a s'Horta a tomar un refresco y comentar la excursión.
Por último solo recordar que ya tenéis el programa de excursiones de la temporada que viene (2019-2020). Como comentario al mismo solo quiero indicar que hay una marcada como de alta dificultad. Aquí os dejo el enlace: Santueri 2019-2020, aunque también podéis descargarlo de nuestra página web.

Powered by Wikiloc

Fotos de la excursión

domingo, 28 de abril de 2019

Na Burguesa - Bellver

La excursión de hoy ha sido una mezcla de excursión urbana y de campo. Aunque no lo parezca, cerca de la ciudad podemos encontrar rincones interesantes integrados en la naturaleza y con algunas cosas curiosas que muchos de nosotros desconocíamos. Jesús nos guiará este día de panades y de votaciones.
Somos 16 (incluidos 3 niños) los que haremos la excursión. Hemos esperado un poco a ver si llegaba alguien rezagado. Al ser día de elecciones, intentaremos ir un poco ligeros para acabar pronto. Salimos de Palma, por la zona de Son Dameto, pasando enseguida la vía cintura. Ya por campo abierto cruzamos por los campos de Son Puigdorfila Vell y entramos en el pinar del Puig de Son Muntaner. Vamos hacia el suroeste por terreno casi plano y por sendero mas o menos definido. Giramos un poco hacia el noroeste para volver otra vez al suroeste. Unos disparos en un campo de tiro cercano nos inquietan pero no pasa de ahí, aunque en ocasiones parece que están tirando una traca de tantos que se oyen. Al final, un poco antes de alcanzar la carretera del campamento militar hacia el Coll de sa Creu hacemos la parada para merendar.
Tras la merienda, nos toca un tramo de carretera un poco incómodo y mas peligroso que los disparos oídos anteriormente. Por suerte no hay muchos coches y lo que mas abunda son ciclistas que suben y bajan por la carretera. Dejamos a la derecha también un campo de golf. Hacemos unos dos kilómetros y medio por asfalto, con algún que otro atajo. Cerca del kilómetro 4 dejamos la carretera y nos metemos en subida fuerte por la ladera, hacia la Serra Mitgera. Hay algún paso delicado, pero se hace sin problemas poniendo las manos y ayudándonos unos a otros. Al final de la ascensión llegamos a un pequeño collado entra la sierra anterior y la Serra de Na Burguesa. Es una zona con apenas vegetación utilizada como cortafuegos. A nuestra derecha tenemos el Coll de sa Creu. Nosotros vamos por la trocha hacia la izquierda y luego suroeste.
Caminamos sin problema por terreno llano. Dejamos a la derecha un desvío que nos llevaría al Mirador d'en Alzamora y poco después, en vez de seguir recto (llegaríamos al Coll des Pastor) nos metemos por la vaguada a la izquierda (hacia el este). Es la Coma del Mal Pas y el Camí des Caragol de Beiana en la que al principio encontramos una especie de safareix. Toca bajar por la misma esquivando rocas, ramas, matas y demás elementos naturales, siempre o casi siempre por el cauce del torrente. No es incómoda la bajada y se ve que es una ruta de tanto en tanto transitada. Al final tras una especie de estret, divisamos una torre de ajedrez gigante. Bueno... no es exactamente eso, pero lo parece. Es una de las garitas vintage que se conservan de un antiguo polvorín (polvorín de Na Baiana). Hay un par de excavaciones en la montaña donde se encontraría la munición y unos edificios para la tropa. En uno de ellos aún se puede leer CANTINA. Hace poco salía en los periódicos una noticia denunciando el abandono del lugar.
Continuamos la excursión bajando por el ancho camino de acceso al polvorín. Dejamos a la derecha una cueva, en su día aprovechada para cualquier necesidad, y al final dejando a la izquierda la antigua cantera de Génova, hoy rellenada, salimos a la carretera de Génova con importante movimiento de tráfico. Se nota que es hora de comer y la gente se desplaza a este importante punto gastronómico. Desde allí seguimos por la carretera hacia la Bonanova viendo de tanto en tanto la figura del Castillo de Bellver donde se celebra hoy el tradicional Diumenge de l'Àngel. Poco antes de llegar a la Bonanova giramos a la izquierda para entrar en la zona de Bellver por el parque de Son Vic. A la sombra de unos pinos hacemos la parada para comer.
Continuamos entrando ya en el recinto del bosque de Bellver y rodeamos el mismo dejando el castillo a nuestra derecha para llegar al poco tiempo al parque de la urbanización Sa Teulera. Allí nos espera una de las sorpresas. En un túnel bajo la vía de cintura han habilitado las paredes a modo de rocódromo. Al final del mismo hay también una serie de aparatos sencillos para hacer ejercicios. Es una bonita forma de aprovechar el lugar y, si bien está algo descuidado, hay una cierta limpieza. El túnel está cerrado por el otro lado por una alambrada por lo que volvemos sobre nuestros pasos saliendo de nuevo al parque.
Desde Sa Teulera y ya por terreno despejado vamos hacia el norte hasta una rotonda y luego, con vistas a Palma, hacia el noreste cruzando terrenos de Son Puigdorfila Nou. Allí, cerca de las casas otra sorpresa. Una plaza de toros abandonada hace vete a saber cuanto tiempo. Jesús dice que cuando vino preparando la excursión se encontraba mas limpia. Hoy la hemos encontrado con mucho escombro y suciedad. Lo de los graffitis es cosa aparte. Raro es el sitio que quede virgen de la acción de estos 'artistas'. También no hace mucho salía en los diarios que la suciedad que se había ido acumulando la habían pegado fuego y habían ido los bomberos. Tras la breve parada nos queda ya muy poco para terminar la excursión. El aparcamiento donde dejamos los coches está a un paso y un poco pasadas las cuatro de la tarde llegamos a ellos.
Ha sido una excursión interesante, conjugando espacio natural y urbano y encontrando sitios curiosos desconocidos para nosotros. En total hemos andado unos 18 km.

Powered by Wikiloc

Fotos de la excursión

domingo, 17 de marzo de 2019

Mola de s'Esclop

A eso de las 9 ya estábamos preparados todos (17) en el Coll de sa Gramola para iniciar la excurión. Pero hay que mover coches para llevarlos al punto de destino (salida del área recreativa de la Boal de ses Serveres).
Allá vamos los conductores y alguno mas mientras los que quedan van adelantando camino por carretera en dirección a las casas de Ses Fontanelles. En ese punto tras dejar los coches nos reencontramos todos nuevamente. Comienza entonces la excursión propiamente dicha, ascendiendo un pequeño collado donde encontramos el camino oficial del GR221 que asciende poco a poco por la Coma des Cellers. A nuestra espalda tenemos el Puig des Avencs y el Puig des Campàs y que van quedando cada vez mas abajo de nosotros.
Tras la Caseta des Carabinero que dejamos a la izquierda, acometemos el Pas Gran, primer paso de la jornada, que nos deja en la parte alta de la coma, en un bonito balcón con vistas hacia Ses Basses y alrededores. Un buen lugar para descansar y merendar. Terminada ésta seguimos ascendiendo por la parte derecha de la coma. Ya tenemos delante la ladera occidental de la Mola de s'Esclop. El sendero se va acercando a un pinar que rodea las casas de Ses Alquerioles, que dejamos a la derecha, en las Planas d'en Cabrit y en seguida giramos a la derecha para hacer el segundo paso de la jornada, el Pas d'en Ponsa, una cornisa en pendiente que te deja en un pequeño espolón donde se tiene también una vista espléndida de la costa. Se ve a lo lejos sa Torre Nova, una de las antiguas torres de vigilancia. Por desgracia se ven también los efectos de los últimos incendios: cantidad de pinos quemados y ennegrecidos, muchos caídos y algunos aún en pie pero desnudos. Quitando esa triste visión el paisaje es realmente espectacular.
No hemos terminado de subir. Nos queda aún un buen trecho. Pero ya lo vemos con otros ojos. Llegamos a una antigua era al lado de la Caseta de sa Mola donde empezamos a cruzarnos con corredores que están haciendo el Galatzó Trail, una carrera de montaña. Se les ve bastante fatigados. Dicen que llevan ya 3 horas corriendo. Nos queda el último repecho para llegar a la cima. Repecho que se hace incómodo pues con tanto corredor e intentando no molestar se hace largo a base de dejar pasar. Pero al final lo conseguimos. Tenemos ya delante el hito geodésico y la Caseta de n'Aragó, hacia la que nos dirigimos para encontrar un poco de sombra. Frente a nosotros, dominando la vista hacia el este, el Puig de Galatzó, a su izquierda la Mola de Planicia y al fondo el Puig Major y el Puig de Massanella, entre otros.
Aunque es de todos conocido, recordaré que François Aragó estuvo en esta caseta en 1808 para hacer la triangulación para la determinación del meridiano y así establecer la medida más exacta posible de la longitud del metro. Allí estuvo bastante tiempo pero al coincidir su estancia con la guerra de la independencia, su presencia estuvo mal vista pues pensaban que era un espía, más aún con los aparatos que manejaba y las señales que hacía. Cuando fueron a apresarle pudo escapar gracias a que se disfrazó de payés y que sabía hablar mallorquín.
Desde la caseta vemos el goteo de corredores que pasan por el control que hay allí establecido. Aprovechamos para descansar y comer a la poca sombra de la caseta. Parece mentira lo que pega el sol de marzo. Tras la comida pasamos junto al vértice geodésico y emprendemos la bajada por la ruta que hacen los corredores para subir. Nuevamente se va un poco despacio para no molestar mucho, aunque también a veces nos piden que pasemos nosotros mientras ellos toman un respiro. La bajada es algo empinada y hay que tomárselo también con calma. Llegamos a un terreno mas llano, dejamos la peña de Es Castellet a la izquierda y la Caseta de s'Esclop a la derecha y pronto llegamos a un puesto de control y avituallamiento de la organización de la carrera. Allí nos desviamos a la izquierda.
Ya todo será bajada por camino ancho. Volvemos a pasar por zonas afectadas por incendios, pasamos por el refugio de sa Coma d'en Vidal (cuando podrá ser un refugio guardado) y, tras un despiste desviándonos de la ruta prefijada, llegamos a la carretera donde cogemos los coches.
Una parada en un bar de Andratx pone colofón a esta excursión. Según el GPS de Jaume, porque los míos o no funcionaron o no los supe hacer funcionar, han sido unos nueve quilómetros y medio en un día fantástico para disfrutar caminando.

Powered by Wikiloc

Fotos de la excursión
Mas fotos de la excursión (Jaume)
Vídeo de la excursión - Jaume (21 Mb)

domingo, 17 de febrero de 2019

Volta a Mallorca: Cala Magraner - S'Algar de Porto Colom (etapa 29)

Dejo los enlaces de las fotos, videos, ruta, etc, etc. No la pude hacer, por lo que pongo el material cedido por Jaume.

Powered by Wikiloc

Fotos de la excursión
Vídeo de la excursión (26 Mb)

domingo, 20 de enero de 2019

Volta a Mallorca: Porto Cristo - Cala Magraner (etapa 28)

Hoy el tiempo no acompañaba en la salida. Frío y lluvia habían indicado los pronósticos y añadiéndole la reciente víspera de Sant Sebastià han hecho que solo unos pocos (7) valientes nos hayamos dado cita en la torre del Serral dels Falcons, en Porto Cristo, para emprender una nueva etapa de la Volta a Mallorca, después de un año de parón. Como en casi todas ellas, Jaume Salom será nuestro guía.
Tras mover coches nos ponemos capas y chubasqueros pues hace un poco de llovizna. Por los alrededores se ven unas nubes bastante negras aunque un poco alejadas. Hacemos la foto de grupo de rigor (no vaya a ser que después no podamos) y emprendemos la marcha.
Será un continuo descubrir calas, a cual mas bonita y solitaria, sin una alma aparte de nosotros. Calas de arena, calas de piedra, calas al lado de urbanizaciones, calas vírgenes. El camino será a ratos cómodo, a ratos pedregoso, a ratos muy áspero, con ese lapiaz costero con piedras plagadas de restos de organismos fósiles, a ratos muy fangoso. Incluso tendremos que utilizar las manos en algún punto para salvar un obstáculo.
Desde la torre des viginalcia andamos hacia el sur saliendo en seguida de la zona asfaltada. En seguida encontramos la primera cala, cala Murta, próxima a las coves del Drac. Tras remontar un poco la vertiente sur de la cala y viendo que el tiempo mejora, aprovechamos para merendar. Los chubasqueros han servido para ahuyentar la lluvia. Solo ha caído esa poca llovizna al inicio y en seguida ha parado y ya no volverá a caer ni una gota mas. Es mas... en ocasiones saldrá el sol que, si bien no calentará como en verano, hará que la manga larga sea un poco molesta.
Tras la merienda retomamos la marcha siempre hacia el suroeste. El terreno es muy pedregoso. En ocasiones se atraviesan grandes arbustos achaparrados de mata. Pasamos cerca de na Magrana (que apenas vemos) y tras un paseo entre las casas de la urbanización de Cala Mendia llegamos a la playa arenosa de cala Anguila.
La siguiente cala será la propia de cala Mendia. Pero antes de llegar hacemos una pequeña parada para hacer un poco de geocaching. Jesús tiene una aplicación que indica 'tesoros' ocultos por aquí y por allá. Se trata de encontrarlos con ayuda de pequeñas pistas que da el que los ha escondido u otras personas que los han encontrado. En esta ocasión no tenemos suerte. El terreno es muy escarpado, con piedras muy erosionadas por el mar y por tanto con infinidad de sitios donde ocultarlo. Hay que pensar que no pueden estar muy a la vista pues cualquiera lo podría quitar o cambiar de sitio. El caso es que tras unos minutos de búsqueda desistimos. No podemos entretenernos mucho más tiempo tampoco, así que otra vez será.
Pasamos por la playa de cala Mendia, también arenosa y de notable extensión, y tras un tramo de cómodo paseo al lado del mar, llegamos a la cala del estany d'en Mas, también de arena aunque no tan grande como las anteriores. Aquí tenemos que ascender con algo de esfuerzo por la pared sur de la cala. Llega ahora un terreno pedregoso pero con mucha tierra entre las piedras. Ir por el sendero es incómodo pues te llenas de barro, aunque ves por donde pisas. Ir por al lado del sendero, entre la vegetación, es incómodo pues no tienes una visión directa de lo que pisas, aunque no te llenas de barro. Así que cada uno va por donde quiere. En poco tiempo llegamos a cala Falcó, pero antes vemos frente a nosotros la cova des Coloms (y alguna que otra que no sabemos el nombre). Cala Falcó es una minúscula calita arenosa. Tras ella nos situamos en seguida sobre la cova des Coloms (unos anclajes en las piedras nos indican el lugar). Poco más adelante llegamos a la cova des Pont. El nombre es por el arco en forma de puente que se ha mantenido en la entrada de la cueva, mientras que todo lo que era el techo o cavidad se ha hundido. Tras otra pequeña cala pedregosa (caló Blanc) llegamos a la playa de cala Barques donde hacemos la parada para comer y descansar (y ver como un par de gaviotas se pelean por comer unas galletas que les tiramos).
Retomamos la marcha cruzando el istmo de la punta de Llevant y pasando por la cala de s'Olla. El terreno ha cambiado un poco. Es pedregoso, si, pero la piedra tiene muchos agujeros y se ven en algunos puntos gran cantidad de señales de organismos fósiles, tipo almejas y ostras. No hay tanto barro y abundan cojinetes espinosos. En seguida llegamos a cala Sequer, con una pequeña playa de arena y donde un portillo de metal (si... no hay paredes, ni rejilla, ni nada; solo una puerta) nos da la bienvenida. El portillo, en realidad, indica un camino de acceso a un megachalet de lujo situado en lo alto de la loma. Rodeamos la loma a ran de la mar hasta la siguiente cala donde nos encontramos con otro portillo (si... igual que antes). Estamos en el caló des Serral. Se ve que los del chalet no sabían muy bien por donde entrar y salir de la playa y decidieron poner unas puertas. La playa de esta cala también es de arena.
Ya nos queda poco para acabar la excursión; hacia atrás vemos a lo lejos la torre del Serral dels Falcons desde donde partíamos por la mañana. Recorremos un tramo de costa hasta llegar a la punta des Moro que da entrada a las calas de cala Magraner, cala Pilota y cala Virgili. Desde la punta solo vemos bien la playa de la segunda. Cala Magraner está en seguida a nuestra derecha, al pie del acantilado sobre el que andamos. No bajamos a la playa. Lo dejaremos para el mes que viene que retomaremos la Volta a Mallorca desde este punto.
El sendero nos conduce hacia el interior y en un momento dado destrepamos hasta llegar al fondo del barranco. La playa la tenemos a nuestra izquierda. Nosotros terminaremos la excursión yendo hacia la derecha cruzando unos campos de cultivo hasta salir a la carretera en el lugar donde dejamos el coche unas horas antes.
La caminata ha sido fantástica y el día al final ha acompañado. Un poco de lluvia, un poco de viento y bastante sol, teniendo en cuenta que las previsiones indicaban lo contrario. En total hemos andado unos 14 km.

Powered by Wikiloc

Aquí podéis ver unas fotos de la excursión.
Y aquí otras fotos (gracias Jaume).

Y aquí un vídeo de la excursión (36 Mb) (También gracias a Jaume).